Entrevista a Juan Raúl Ferreira, Presidente de la Institución Nacional de Derechos Humanos

29/Ene/2014

Semanario Hebreo, por Ana Jerozolimski

Entrevista a Juan Raúl Ferreira, Presidente de la Institución Nacional de Derechos Humanos

(Primera parte)El Dr. Juan Raúl Ferreira preside desde el 20 de junio la Institución Nacional de Derechos Humanos, lo cual acapara gran parte de su atención y despierta en él un emocionado entusiasmo. En esta entrevista especial, Juan Raúl explica ampliamente tanto las generalidades de dicho marco como varios detalles de los trabajos que le ocupan. Es un tema que por lo nuevo de la institución, aún resulta bastante desconocido.Esta es una oportunidad para saber qué hace la INNDDHH.LA INSTITUCIÓN Y LA POLÍTICAP: Juan Raúl, creo que para comenzar por el principio, sería bueno aclarar cómo se compone la Institución Nacional de Derechos Humanos, qué tiene que ver en ella la política nacional o mejor dicho la partidaria..R: Yo creo que es legítimo que el espectro de la gente que está sentada ahí represente lo más amplio del pensamiento de la sociedad, pero la Institución Nacional de Derechos Humanos es un órgano al que la ley le marca una prohibición absoluta de proselitismo político, de recibir instrucciones de partidos políticos. Es más: los partidos políticos ni siquiera podían proponer candidatos. La nominación para la elección que hizo la Asamblea General tenía que venir de organizaciones reconocidas legalmente, de la sociedad civil o de legisladores a título individual, o sea, un legislador colorado podía proponer a una persona de confianza o jurista o lo que sea de otro partido, pero en realidad no hay representación partidaria, no debe haber, está prohibido que haya.P: Lo cual no significa que ustedes, los miembros, no tengan dimensión política..R: Alguno de nosotros venimos de la vida pública y tenemos una identidad política muy conocida. Esto le puede dar mayor o menor representatividad, pero no podemos, ninguno, ser portavoces o representantes y nos está estrictamente prohibido pedir instrucciones partidarias o responder a políticas partidarias.En mi caso fui propuesto por la Asociación Latinoamericana de Derechos Humanos, que es una asociación que en el caso de Uruguay tiene en su directorio gente de todos los partidos políticos. El Dr Sanguinetti es miembro del Consejo Directivo, la Dra. Mónica Xavier es miembro del Comité Ejecutivo y yo era y renuncié por esta misma circunstancia. Tampoco podemos integrar la directiva de instituciones de la sociedad civil, ni fundaciones; hay instituciones que yo quiero mucho y cuyo directorio integraba y tuve que renunciar. La única actividad que nos está permitida es la docencia.”CONSTRUYENDO DEMOCRACIA”. NO SÓLO POR EL PASADO.P: Estás ya hace medio año aproximadamente como presidente de la Institución Nacional de Derechos Humanos y siento que hay que explicar a la ciudadanía de qué se trata. Es que esto nunca existió y la gente puede preguntarse si acaso eso no significa que no era necesario. ¿Cómo explicar al ciudadano uruguayo promedio qué hace la institución?R: Se me ocurre que lo primero es mencionar que se construye democracia. La democracia requiere una construcción permanente. No hay un momento en que llegamos a una democracia ideal, que no precisa nada, que todo está perfecto .Y me parece una buena manera de plantearlo porque los derechos humanos la gente los asocia automáticamente a los derechos humanos del pasado, que sin duda son derechos humanos y que hay que respetarlos…R: Te refieres al tema de la violación de los derechos humanos durante la dictadura.R: Claro..Pero sin descuidar el pasado, que es parte del tema, cuando desde la Institución se habla de Derechos Humanos, se habla de los problemas de la gente de todos los días. Ese es un gran desafío. Tenemos que llevar el término de los Derechos Humanos a lo cotidiano.P: O sea, Derechos Humanos no es sólo un concepto que surge sólo cuando hay un gobierno opresor, cuando no hay democracia desde el punto de vista político, sino en la vida diaria de cada persona.R: Pero no solamente eso. Sobre el tema del pasado, nosotros prácticamente no tenemos competencia porque, por un lado, cuando un hecho toma estado judicial nosotros perdemos competencia y prácticamente todos los casos vinculados al pasado -no todos-ya tienen estado judicial. Pero además, porque se ha creado una secretaría en la órbita de la Presidencia de la República que se llama Secretaría de Derechos Humanos del Pasado Reciente. Quiere decir que todo lo que esclarecimiento, por ejemplo, del paradero de un desaparecido, es competencia de esta secretaría.P: En resumen, el trabajo de la Institución no pasa por lo relacionado al quiebre en la democracia uruguaya años atrás sino por los derechos humanos de la ciudadanía hoy, en las diferentes vertientes de su vida diaria…R: Claro…Pero quisiera hacer una observación más sobre el pasado. Gerardo Caetano lo explicó de modo brillante en el acto de La Noche de los Cristales Rotos: los derechos humanos son una cosa atemporal. No me cabe duda que sobre todo cuando la gente joven  piensa en los derechos humanos del pasado, está el tema de que ellos no lo han vivido, aunque hay muchos jóvenes que no vivieron la Shoá pero la sienten como una cosa intensa. Yo creo que la gran diferencia acá en Uruguay es que se ha roto- y ojalá se recompusiera, pero ese ya no es un tema mío- el consenso político de cómo manejar este tema del pasado .Entonces, genera temas políticos muy fuertes.P: ¿Acaso hubo consenso político alguna vez? Creo que esa es la pregunta…R: No, no hubo. Entonces lo que uno ve es que los jóvenes asocian el tema de los derechos humanos del pasado con la controversia, con enfrentamiento. Lo que ven por televisión son debates donde los diferentes partidos políticos hablan con gran fervor. Esta situación, lejos de acercarlos a la problemática del pasado, les genera como cierto rechazo porque lo asocian a la polémica. Yo creo que no hay que tenerle miedo a la polémica. No es mala. Por definición la democracia tiene que generar polémica. Pero llega un momento en que la gente más joven asocia los temas del pasado a un enfrentamiento excesivo entre diferentes sectores de la sociedad.P: Y acá entra el desafío de la educación…R: Así es. Es muy importante. Y se me vino a la cabeza un nombre, de una persona que ha visitado Israel, que conoce, muy comprometido con la causa de la Shoá y de los derechos humanos en el Uruguay, Oscar Dostuet.P: Un querido amigo personal, que es hoy inclusive miembro de la Directiva del Centro Recordatorio del Holocausto, destacado profesor de historia.R: Es un educador con la obsesión de formar éticamente en los derechos humanos y cuando pienso en Oscar pienso en el que tira abajo las paredes de las aulas, es decir, que saca a los estudiantes a la calle, que los hace vivir experiencias reales. Ahora que estamos todos llorando literalmente la muerte de Mandela, yo por ejemplo a Oscar lo asocio con esas actividades que año a año hace para juntar estudiantes de todo el país en actividades vivas, a veces con mucha connotación recreativa para que los estudiantes lo vivan con entusiasmo recordando todos los años a Mandela. Yo creo que si hay alguien en este país que merece que se le diga que es uno de los que todos estamos mirando para que pueda ser cierto que Mandela partió pero no se fue, es Oscar. Todo esto surge al explicar que la educación es muy importante en materia de derechos humanos.DERECHOS HUMANOS EN LA VIDA DIARIAP: Juan Raúl, esto me lleva a que la Institución Nacional de Derechos Humanos siente que hay que educar a la sociedad también en cuanto a sus derechos humanos en la vida diaria…que es justamente donde entran ustedes en acción.R: Acá hay un gran esfuerzo educativo para que nosotros, con hechos, con cosas concretas le vayamos explicando a la gente a qué nos estamos refiriendo, a los derechos humanos  desde un niño, un estudiante, una persona adulta, desde el momento en que se despierta hasta el momento en que se acuesta. Esto ser refiere a su derecho a la educación, a poder estar tranquilo si los chicos salen de noche, poder tener acceso libre a la salud, a la educación…Todo eso son derechos humanos y es también un concepto que en el mundo ha ido ganando terreno de tal suerte que hoy los derechos humanos hacen un corte transversal en la sociedad.P: Están relacionados a todos los ámbitos de la vida…R: Puede ser especialmente claro, por ejemplo, en lo relacionado a la Salud Pública y el derecho a ella que tiene el ciudadano. Pero si tú empiezas a rascar empiezas a pensar: ¿qué ministerio no tiene en su competencia temas que afecten los derechos humanos? ¿Por qué esta idea no ha ganado todavía mucha conciencia en la opinión pública? También es verdad que nosotros por ser una institución nueva vamos manejando con mucha prudencia la difusión de nuestra existencia porque sería horrible que la demanda nos desborde. Pero poco a poco, en la medida que vamos mejorando en la infraestructura, en experiencia también vamos dando pasos muy importantes.P: Con esto das a entender que ya hay suficiente concientización en la sociedad como para saber que la gente puede dirigirse a ustedes por algún problema.Esto es lo relacionado al rol de la Institución como Defensoría del Pueblo.R: Sí, sin duda…Es impresionante la gente que viene todos los días.P: ¿A plantear qué?R: A plantear de todo. En realidad somos tres cosas en una misma institución pero una de esas tres cosas es en efecto la Defensoría del Pueblo, entonces puede llegar cualquiera con una denuncia.P: ¿Podrías dar ejemplos concretos?R: Hace un mes y medio más o menos que una persona llegó cuando los sucesos de Santa Catalina, una persona femenina que pidió reserva de identidad y figura en nuestro informe como XX, en un estado de desesperación muy grande, desprotegida desde el punto de vista legal, pero además lastimada físicamente, pero son casos extremos. Recordemos que fue todo un movimiento donde hubo un procedimiento de abuso policial.P: ¿En qué consistió vuestra intervención?R: Una directora de la institución y los abogados rápidamente la llevaron a un juzgado. Primero avisan al juez .La Institución la ayudó a ella a presentar la denuncia y formuló además una denuncia penal. Son casos extremos, el haber llegado a hacer nosotros una denuncia penal. Hasta ahora fue el único caso.P: Pero creo que sería importante entonces que se explique qué es lo que hace más de rutina, o sea lo que no es excepción…R: Hay situaciones de gente que siente que no tiene acceso a la justicia, que tiene un expediente durmiendo hace no sé cuánto tiempo. Nosotros no tenemos competencia sobre ningún fallo judicial naturalmente porque sería violatorio del principio de independencia jurisdiccional del Poder Judicial, pero sí tenemos la capacidad de hacer recomendaciones a los tres poderes del estado. Entonces cuando se da una situación de ese tipo por ejemplo, la ley habilita un recurso que se llama “amicus curi”, que en latín quiere decir “amigo del juez” que es presentarnos en una causa de la cual no somos parte y presentar un escrito dando nuestra opinión procesal, que es una opinión no obligatoria para el juez pero que es importante.P: Porque tiene valor moral…R: Sí. Y da resultado. También es bueno que los jueces sepan que todo el mundo es fruto del escrutinio público.P: O sea que a raíz de las denuncias ante la INNDDHH, puede que el que tenga que presentar cuentas sea el Estado…R: -Normalmente nosotros somos un órgano de contralor fundamentalmente del Estado. La ley dice que tenemos competencia sobre todos los órganos del estado, de los tres poderes del Estado y de aquellas empresas privadas que brindan servicios públicos.P: Me gustaría tener un ejemplo concreto…R: Vamos a elegir un ejemplo cualquiera, al azar: una compañía de transporte, un caso que estoy inventando. Eso es un servicio público. ¿Qué es lo que hacemos? No vamos a ir a la empresa de transporte a hablar con el gerente y decirle: “mire, le vamos a recomendar tal cosa en el trato con los pasajeros”. Lo que vamos a hacer es ir al órgano del Estado que tiene la responsabilidad de tomar de controlar el transporte público y le vamos a recomendar que tome acciones en ese sentido, pero nosotros procuramos y hasta ahora ha sido siempre así, hacer nuestras recomendaciones aunque tenemos una legitimación activa sobre los sectores privados que brindan servicios públicos de dirigirnos siempre a los órganos del Estado. Tampoco se trata de que somos una policía del Estado. Sería un error que la gente nos conciba así. De todos modos, te diré que el mero hecho de la denuncia no genera una resolución. A esta altura sí tenemos un grupo investigativo muy capacitado.P: ¿Qué quiere decir en este tema tener un grupo investigativo capacitado?R: Quiere decir un equipo que puede concurrir al lugar de los hechos, verificar la información, conseguir testigos y demás…pero no es sólo eso. Es decir, el equipo que trabaja estrictamente en la parte de defensoría tiene muchos abogados obviamente pero también psicólogos, a veces necesitamos el apoyo de un médico, educadores. Tenemos una profesional, psicóloga, que realmente ha sido una ayuda muy grande porque capta con mucha rapidez primero, la buena intención del denunciante y pero además, puede darse cuenta si el denunciante no está en su sano juicio. Cuando viene alguien que tiene problemas psicológicos -y también tenemos este tipo de denunciantes- alguno que cree que lo persiguen los platos voladores o internet…hay de todo.P: Simplemente van y tocan la puerta de la institución…R: Así es. Tú has visto que nosotros tenemos en la oficina una entrada pública para aquel que viene a hacer cualquier tipo de gestión, de entrevista con alguien. Pero está además el área de denuncias que tenemos muy protegida en la privacidad. Es una puerta no transparente, donde contrariamente a lo que sería un juzgado, una comisaría, no hay una sala de espera grande. Cada uno puede esperar con su contención, se dan las entrevistas, hay gente que llega espontáneamente. Se trata de armar todo el esquema de manera que la gente no tenga que esperar, que la gente no esté sola todo el período de espera, que la atención comience desde el mismo momento en que llega a la institución.P: Lidiar con gente es complejo…me imagino que también a la Institución llegará de todo…R: Yo recuerdo un caso de una señora que nos hacía una denuncia que sonaba disparatada desde un principio y nos mostraba sus certificados médicos y nos decía: “aquí yo les tengo la demostración que yo estoy bien” y uno leía y lo que tenía en realidad era un certificado médico que demostraba manías persecutorias, etc. Ahora ella lo exhibía porque estaba convencida de otra cosa. ¿Qué es lo que pasa con estos casos? Obviamente la denuncia no tiene importancia per se pero la persona sí, porque esa persona cree que lo que está denunciando es cierto y ella lo sufre como si fuera cierto, entonces tiene el derecho de recibir su contención, poderla orientar, si sabemos que tiene un médico que la trata avisarle al médico lo que ocurrió, si no buscar una manera de que reciba terapia.P: O sea que ustedes se ocupan de tratar de guiar y ayudar, aunque no corresponda realmente atender la denuncia puntual…R: Claro…El tema no pasa sólo por los casos en los que la denuncia es real. Nosotros no nos podemos lavar las manos y dejar que salga a la calle sin ninguna protección y contención. Es una persona que necesita ayuda y que es un derecho que la sociedad la proteja.P: ¿A la gente le resulta más fácil dirigirse a la Institución que a “las autoridades”?R: Acá hay más informalidad, sin forma letrada, sin timbre, sin sellos, sin conocimiento procesal previo. Si tú vas a un juzgado, tenés que ir con un abogado, tenés que saber que la violación de tu derecho implica un delito. Hay veces que no, que se avasalla el derecho de una persona pero no se comete un delito. Por ejemplo, yo ayer vi en la puerta de mi casa un muchacho que deliberadamente le pegó un empujón a una señora y todos la ayudamos a levantar; eso es un avasallamiento horrible a los derechos de esta señora. Yo tengo mis dudas que sea un delito, porque no se lastimó, no hay lesiones leves, entonces no es solamente lo que es un delito en el juzgado. Tenés que saber lo que es o no un delito. Tenés que tener un abogado o pagarle o conseguir uno de oficio, pagar los timbres, tenés que tener conciencia de qué cosa podés denunciar o qué cosa está fuera de la competencia del juzgado .Acá el principio es de informalidad.P: Y ahí entran ustedes…R: Decimos a la ciudadanía: Usted tiene un problema, no ha encontrado la parte del Estado ante la que tiene que golpear, venga. Ese es el principio de la Defensoría del Pueblo. En muchos casos la persona sí tiene un organismo al cual dirigirse y no sabe. Por poner un ejemplo, la oficina de Defensa de los Derechos del Consumidor que funciona muy bien. Hay gente que en realidad llega pero no sabe; una de las tareas es orientarle, informarle, acompañarlo incluso en la gestión, sugerir a quién dirigirse, contactar al lugar para que lo atiendan cuando llegue… Eso es parte de la cosa. Otros son casos que son típicamente de nuestra competencia.P: ¿Por ejemplo?R: Hay casos de violencia doméstica, hay casos de algunos que se les liquida mal la jubilación o que cree que se les liquida mal la jubilación, o que sabe de situaciones de irregularidad, de violación de derechos de niños en su barrio, entonces esa persona se puede amparar en el artículo 16 de la ley y mantener su anonimato. Cuando la persona denuncia una situación propia, generalmente si nos pide anonimato es muy difícil. Una persona a la quien se le negó atención médica, casos de discapacidad… es impresionante la cantidad de casos que recibimos. Siento que yo también he tenido un proceso de gran aprendizaje. Durante mucho tiempo asociábamos discapacidad al derecho de los discapacitados físicos, a los accesos universales, por ejemplo. Pero recibimos muchos casos de chicos autistas o de otro tipo de discapacidades donde no se da la atención necesaria en la escuela, a veces no se les recibe en la escuela o en centros. Este fue un caso concreto, por ejemplo, en estos centros CAIF o privados donde las madres van a trabajar y después van a buscar a sus chicos fuera de la hora de trabajo y cuando los chicos tienen discapacidades, hay veces que se les discrimina. Incluso hay veces que se discrimina sin conciencia de la discriminación. Por ejemplo, pasa que vamos a una guardería y decimos: este chico tiene derecho a ser cuidado mientras la madre trabaja y nos dicen: sí, lo que pasa es que distrae a los otros chicos porque requiere una atención especial. Sí, pero es su derecho. Es decir, no siempre la violación de un derecho está vinculada al dolo, a la voluntad de violar.MÁS ALLÁ DE LA DENUNCIA CONCRETAP: Se me ocurre que el tema de fondo es no sólo atender las denuncias puntuales que les llegan, sino ir más allá de ello y tratar de remediar situaciones por las cuales esas violaciones de los derechos humanos pueden darse.R: Nosotros tenemos la obligación de recomendar políticas públicas que fomenten, que promuevan y que consoliden los derechos humanos. Éste es un tema que de repente no está en la agenda política y que nosotros tenemos que procurar que sí lo esté. Puede surgir como consecuencia de la defensoría. Es decir, si sobre un problema recibimos 500 denuncias -por dar un ejemplo- algo está pasando en la sociedad. Por ejemplo, es el caso de la reforma de la judicatura que es una recomendación que le hacemos al Poder Judicial, o el caso de una recomendación al Poder Ejecutivo sobre una política social o al Parlamento o una iniciativa. Yo creo, es más, que nosotros a esta altura tenemos que pasar más de una política reactiva a una política de propuesta, de sugerencia que no quiere decir “están haciendo esto mal”, quiere decir “mire, se nos ocurrió esto, de repente es una buena idea que trabajemos juntos y que haya un proyecto de ley sobre este tema que lo hemos tenido muy abandonado”.P: Sugerir políticas, proyectos, iniciativas, a alguno de los poderes…R: Exactamente. A mí me impresiona mucho cómo cuando presentamos un informe temático, además de la prensa, concurren Ministros de Estado, legisladores de todos los partidos. Es algo muy positivo.P: Cuando uno piensa en derechos humanos, está claro que de por medio no hay solamente consideraciones nacionales sino tratados internacionales…R: Así es. Por ejemplo, entra en funcionamiento el Mecanismo Nacional General de Prevención que es el mecanismo que ha previsto las Naciones Unidas para prevenir la tortura, el maltrato y demás tratos inhumanos o degradantes. Uruguay es firmante de la Convención contra la Tortura .Pero nunca se había llegado a establecer el órgano competente en la protección de estos derechos que prevé las Naciones Unidas que implica preservar. Esto es preventivo y no reactivo, a través de mecanismos de control, incluso de inspección in situ.P : O sea que ustedes pueden ir a las cárceles a ver qué pasa….R: Nosotros podemos llegar a todo los centros de reclusión sin orden judicial previa, no sólo públicos sino privados. Puede ser un geriátrico, un hogar de ancianos, puede ser un lugar de reclusión de menores, puede ser una comisaría, cualquier lugar donde haya alguien -aunque sea por razones de salud -privado de su libertad, ver las condiciones de vida y hacer las recomendaciones pertinentes .Quiera Dios que no sea necesario, pero en el caso de verificar malos tratos , podemos tomar acciones de emergencia para evitar que se siga cometiendo una violación de derechos humanos y dar cuenta a posteriori a la justicia. Este mecanismo requiere de niveles de independencia muy grandes. Como la ley dice que tiene que ser en coordinación con el Ministerio de Relaciones Exteriores, en un trabajo maravilloso que yo creo que -a mí me viene el orgullo uruguayo-no sé si en otros países hubiera sido posible, hemos trabajado con las autoridades del ministerio en un protocolo que establece en toda la labor de contralor la competencia exclusiva de la Institución Nacional de Derechos Humanos.P: En este caso, mencionas el protocolo con la Cancillería…pero también a otros niveles, vuestro trabajo requiere un contacto constante con las diferentes instancias del Estado, para poder responder a las denuncias de los ciudadanos…¿Verdad?R: Nuestro rol es evitar, prevenir, corregir pero la denuncia per se no es un objetivo de la institución. Lo que hacemos en primer lugar cuando hay una denuncia que involucra un órgano del Estado, es poner en conocimiento al órgano competente. En este momento tenemos un diálogo muy fluido con todos los ministros, con los presidentes de los entes autónomos, con las agencias del Estado en distintos niveles .Tenemos por ejemplo un diálogo muy fluido con el Ministro del Interior. Ayer me llamó por teléfono. Tanto él como su secretario nos dan entrevistas cuando pedimos, pero uno no puede hacer funcionar una institución con esa masa crítica tan grande sobre la base que cada vez que hay una denuncia hablar con el ministro. Entonces, en cada órgano del Estado tenemos un punto focal, es decir, alguien que es el responsable de atender los casos nuestros, de facilitar la información que solicitamos y demás.Cuando tenemos suficientes elementos como para una resolución, puede haber casos donde tengamos que decir que declinamos competencia, ya sea porque no entra dentro de nuestra jurisdicción o ya sea porque no se ha reunido ninguna prueba que avale la denuncia. Pero si se da el caso contrario, nosotros también, antes de hacer una recomendación, tratamos siempre de solucionar las cosas por el camino de los buenos oficios, entonces ahí sí ir a ver al ministro, plantearle la situación. Muchos casos-te diría que la mayoría- se solucionan en esa instancia y evitan la situación de la formalidad de presentar una recomendación que vendría a ser un dictamen que no tiene carácter obligatorio.P: La Institución puede recomendar, no imponer…R: Así es. Lo nuestro no tiene carácter obligatorio pero esto ha funcionado. La fuerza que tienen nuestras resoluciones es moral y la de lo fundado que están, tanto los hechos como la explicitación jurídica de los hechos. La ley prevé- pero nunca se ha llegado a una situación de esa clase- que si el órgano del Estado ante el que presentamos nuestras conclusiones decide no seguir nuestras recomendaciones, nos lo tiene que comunicar por escrito fundamentándolo y nosotros nos damos por satisfechos con la explicación o siempre tenemos la facultad de enviar nuestra queja, nuestro dictamen y nuestras recomendaciones a la Asamblea General.P: Es todo un mundo pues…Seguiremos con esta entrevista, abordando también el tema del racismo y el antisemitismo. Será la próxima entrega.